El tatuaje es un arte de comunicación y comprensión de las personas y de darles imágenes en la piel que pueden mejorar su estado de ánimo y aportar mucho positivo a su vida. Las mujeres y los hombres, que sólo desean crear algo muy bello y significativo en su cuerpo, acuden a un maestro del tatuaje para pedirle ayuda en la elección de una imagen que se creará posteriormente en su piel.
Los verdaderos profesionales del tatuaje son grandes psicólogos: nunca ofrecerán a una joven que cubra todo su cuerpo con tatuajes que asusten, y, naturalmente, disuadirán a una persona de tatuarse algunos lemas agresivos que más tarde puedan traerle demasiados problemas.
El tatuador, que ve a un cliente con muchos tatuajes, puede ofrecerle añadir alguna imagen original a su "colección". Normalmente, para crear algunas imágenes de fantasía, trabaja con la aguja de liner redonda 9RL (0,30-0,35 mm I de diámetro). Al penetrar en la piel, estas agujas dejan tinta bajo ella, y -paso a paso- crean una línea gruesa y sólida que forma una imagen original.
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