La palabra tatuaje deriva del tahitiano "tatau" - segar (Arp 2012). La técnica de base del tatuaje es conocida por la humanidad desde hace casi 5000 años, y hasta ahora su principio principal ha cambiado muy poco: un pigmento de color se inserta bajo la piel para crear un determinado símbolo. El posible descubrimiento de esta técnica es accidental: el hombre antiguo podría haber pintado un grafiti o una férula en la piel con algo similar a la ceniza, de modo que después de la protección la ceniza quedara debajo de la piel, dejando un rastro permanente. Sea esta suposición correcta o no, el hecho es que el tatuaje ya se practicaba en la Edad de Bronce. Numerosos repertorios arqueológicos ofrecen una cartografía más o menos precisa de la comparación y difusión del tatuaje en todo el mundo.
Tatuajes de la Edad de Bronce
En septiembre de 1991 se encontró una momia de un hombre de la Edad de Bronce en los Alpes de Otzal, en el límite entre Austria e Italia (Hewitt 1997). La momia de un hombre hallado en la incisión en el año 3300 a.C. estaba en perfectas condiciones y, además del cuerpo, se han hallado numerosos utensilios y objetos. attrezzature. Además, el cuerpo de Otzi el Hombre salido del jacinto, llamado así por el lugar donde se descubrió, tenía 57 tatuajes sencillos. Los tatuajes tenían forma de puntas y líneas de 15 centímetros de longitud y se encontraban en la cavidad posterior, cerca del ginocchio siniestro y en la parte inferior de la columna vertebral. Aunque sólo se puedan hacer impresiones superficiales sobre la función social de estos segmentos, su posición se corresponde con las líneas de agopunción cutánea, que antes de este descubrimiento se decía que eran originarias de Asia, sólo del año 1000 a. C.C. y que, a su vez, podrían servir de base para una explicación médica de la función de los tatuajes de Otzi -podrían estar hechos para tratar la artritis u otras enfermedades locomotoras (Dorfer 1999).