Sin lugar a dudas, toda empresa tiene un conjunto de normas que deben seguir todos sus clientes: en última instancia, dicho listado puede incluir normas, prohibiciones, así como algunos consejos útiles. Cabe destacar que el negocio de los tatuajes no es una excepción a esta regla, por lo que tiene mucho sentido profundizar en algunas de las especificaciones antes de visitar un salón de tatuajes. A continuación, encontrarás las cosas más útiles que te serán de utilidad si decides visitar un lugar de tatuajes.
En primer lugar, puede serte útil saber qué buscas en cuanto a tatuajes. ¿Tienes un diseño claro en mente? ¿Quizás tengas conocimientos respecto al estilo? ¿Y sobre el tamaño y las sugerencias concretas de partes del cuerpo? Es vital que respondas a estas preguntas antes de plantearte pedir a un profesional del tatuaje que te haga el trabajo. En segundo lugar, debes darte cuenta de que todos los consejos que des durante el trabajo deben ser obvios. Como regla general, todo tatuador sabe lo que hace, por lo que no es necesario interrumpir el proceso con lo que considerarías que tiene sentido.
Al mismo tiempo, no te olvides de dar propinas o de valorar el trabajo de los artistas del tatuaje. En la mayoría de los casos, están manipulando algo realmente especial (tu cuerpo), por lo que merecen cierto reconocimiento a largo plazo. Puedes sentirte libre de dejar algo de dinero extra, escribir una reseña del tatuador que te haya gustado, así como recomendar un salón a todos tus amigos aficionados al tatuaje. Estos pasos no son obligatorios, pero demuestran cierta ética y son valorados por las personas que trabajan en el sector.
Mientras tanto, no deberías plantearte beber o estar colocado para facilitarte el proceso en general. Existe una pequeña posibilidad de que olvides la razón inicial por la que viniste a hacerte el tatuaje o de que abrumes al artista con el olor y el estado de ánimo que contemplas en ese momento. En cuanto el artista experto vea algún signo de abuso de alcohol, se negará a atenderte, lo que puede ser bastante desafortunado. Por tanto, tiene mucho sentido mantenerse sobrio y cumplir todas las normas de sentido común establecidas por el artista en todo el mundo.
Por último, no debes olvidar mantener un sólido nivel de higiene personal cuando quieras someterte al procedimiento del tatuaje: sólo va a facilitar el proceso en general para todas las partes implicadas, por lo que es imprescindible hacerlo con una perspectiva a largo plazo.